Los niños y niñas

Cuando trabajo con niños y niñas lo hago, sobre todo, bajo la mirada gestáltica. Una mirada amorosa y respetuosa que confía en la autorregulación organísmica del niñ@.

El niño o la niña dispondrá de su espacio terapéutico individual, no obstante, cuando se trabaja con menores es fundamental incorporar a los padres, o tutores del menor en el proceso.

El espacio acolchado de la sala, nos permite sentarnos en el suelo dando a l@s niñ@s la escucha activa que necesitan, estando amb@s a la misma altura, a su nivel, donde trabajamos jugando.

En las sesiones a través del juego aprovecharé la imaginación, la metáfora, la expresión corporal, la expresión plástica, el juego simbólico, la fantasía... del niñ@ para favorecer su desarrollo afectivo y emocional, integrando su mundo verbal y no verbal. Elaborando con ello su problemática o síntoma. Acompañando el proceso siempre a través del juego.

Sesión de juego (niña de 6 años)
Sesión de juego (niña de 6 años)

Un espacio seguro para el niñ@ y su familia, creando una conexión con todos los miembros del sistema familiar, basada en el respeto, cuidado y no-culpabilización.

L@s adolescentes:

Período vital de transición del yo infantil a la construcción de la identidad adulta. El cuerpo les cambia tan rápido que ni ell@s se reconocen. En ocasiones, en su interior sienten angustia, aburrimiento, vacío y otras sensaciones que no saben poner nombre porque las desconocen.

La terapia ayuda a poder mirar dentro de ell@s y poner palabras a lo que les están sucediendo.

En esa búsqueda de autonomía e identidad que experimentan, los padres y las madres, a veces, no saben cómo acercarse a sus hij@s. Los adolescentes quieren estar lejos de mamá y papá pero, a la vez, necesitan sentir que se les demuestre que son importantes para ell@s.

Un hecho que nos podemos encontrar en l@s adolescentes son las conductas violentas, siendo éstas, en ocasiones, hacia uno o ambos padres. El proceso buscará pasar del acto violento a la palabra y, para ello, la intervención familiar será necesaria.

Yo y mis diferentes identidades (chica de 17 años)
Yo y mis diferentes identidades (chica de 17 años)

Para el sistema familiar es la etapa más vulnerable por el cuestionamiento que supone la misma adolescencia: valores, límites, etc...